jueves, 1 de enero de 2009

BATÁN

- BATÁN DE MEMBIBRE DE LA HOZ-

“¿Estoy yo obligado, a dicha, siendo, como soy, caballero, a conocer y distinguir los sones, y saber cuáles son de batán o no?
-Don Quijote de la Mancha-
Miguel de Cervantes

Define el diccionario de la Real Academia: Batán.- “Máquina, generalmente hidráulica, compuesta de gruesos mazos de madera, movidos por un eje, para golpear, desengrasar, y enfundir los paños”, es decir, para “dar a los paños de lana y otros tejidos el cuerpo correspondiente”. Entre los otros tejidos destacan los fieltros, “especie de paño compuesto por un conglomerado de fibras, generalmente de lanas, no tejidas, que se adhieren entre ellas por batanado” (1)

Los batanes eran unos ingenios que estaban muy extendidos y asociados principalmente a la industria textil lanera tradicional. Con el hundimiento de ésta y la industrialización la mayoría de los batanes cayeron pronto en desuso manteniéndose los vinculados a los tejedores artesanales que también iban siendo cada vez menos. Por estos motivos y por estar la maquinaria construida en madera hoy en día es muy difícil encontrar un batan completo.

En un batán, como en un martinete, se transforma el movimiento circular en un movimiento de elevación y caída de los mazos. La construcción es muy sencilla y se realiza toda en madera, de la llamada carpintería de lo prieto, donde las uniones se realizan con encastres, cuñas y pasadores de madera.

Los batanes se sitúan, como todo ingenio hidráulico, cerca de un curso de agua. Alguno, como el de Santa Engracia en las Hoces del Duratón, estaba situado en la surgencia de un manantial “A pocos pasos del río, donde la peña empieza a levantarse y brota una fuente tan copiosa que mueve un batán, fabricaron los hermanos ermita a Engracia”(2)

Los edificios suelen ser construcciones muy sencillas, lo imprescindible para albergar la maquinaria y poco más. La obra para traer el agua es también muy simple, pues un batán no necesita ni grandes caudales ni un salto muy elevado.

En la maquinaria de un batán podemos diferenciar:
- El conjunto encargado del movimiento: rueda hidráulica-árbol-elevadores.
- La parte que realiza el trabajo: los mazos.
- El lugar donde se realiza el trabajo: la pila.

En el árbol, que está construido de un tronco de madera, se sitúa en un extremo la rueda hidráulica y en el extremo contrario están los elevadores. La rueda hidráulica es de las denominadas de eje horizontal y será la encargada de transformar la energía hidráulica en movimiento. Los elevadores, uno por cada mazo, atraviesan al eje y uno con otro están situados perpendicularmente de tal manera que cuando todo el conjunto se mueve, por la acción del agua sobre las palas de la rueda hidráulica, los elevadores irán ascendiendo alternativamente los brazos con sus mazos y dejándolos caer sobre la pila como describe el dicho popular: “ los mazos del batán uno viene y otro va”.

Los mazos son dos grandes martillos de madera de encina. Están suspendidos de dos largos brazos, tirantes, aspas o varas, que los atraviesan asomando por su lado inferior y fijados a éstos por cuñas. Todo este conjunto cuelga de un soporte llamado “castillo” formado por un entramado de postes verticales y vigas horizontales “mesa”. Para evitar que los mazos se descuelguen los tirantes llevan un pequeño tope en forma de pasador. Las zancas son unas protecciones de madera que llevan los tirantes en la zona de roce con las levas (3)
La pila es un cajón, formado con un tronco de árbol ahuecado, abierto por el lado superior y el lado de los mazos y es donde se coloca la tela para batanar. La pila tiene un canal con orificios en su parte superior por donde entra el agua para mojar las telas cuando se están batanando.

El proceso de batanado constaba de varias fases:
Lavado.- Primero se someten las piezas a un intenso lavado de dos o tres horas de duración. Comenta Carlos de Lecea al respecto: “El jabón también se aplicaba en los batanes para limpiar los paños del aceite y de todas las manchas que en las primeras operaciones adquirían, siendo precisas nada menos que seis libras de jabón por cada pieza de treinta y cinco a cuarenta varas, según se consigna en la Real Cédula de 27 de Octubre de 1759 respecto a las franquicias y exenciones que habían de gozar los fabricantes”(4)
Batanado.- Las piezas bien mojadas se colocan en la pila, dobladas en sucesivos pliegues, unos sobre otros y a su vez una pieza tras otra hasta llenar por completo la pila.
Al ponerse en movimiento la rueda los elevadores hacen golpear las mazas alternativamente de tal forma que mientras una maza sujeta la otra golpea y viceversa. Las mazas tienen unas estrías que arrastran en su retroceso y dan vueltas a la mitad de la tela mientras la otra mitad es golpeada y sujeta por la otra maza.

El proceso, una vez iniciado, no necesita de la mano del hombre pero sí de su vigilancia para evitar desgarros.
Dependiendo del tipo de tejido y su acabado así dura el proceso. Cuando la tela encoje de 100 a 80 cm. al tiempo empleado se denomina “batán”, al doble “doble batán” y a la mitad “medio batán”.
Secado.- Una vez dado el tiempo estimado, se sacan las telas, se desenrollan, se estiran y se ponen al sol a secar.

La importancia del oficio de batanero y su repercusión social era tal que se le eximía del servicio militar, como se dicta en la Real Cédula de 1771 donde se puede leer:
“ SABED, que con objeto de que no decaigan las faenas de Batanes, y de Prensas de Ropas, que son tan importantes y útiles al Estado, por mi Real Decreto de diez de este mes, que fue publicado, y mandado cumplir por el mi Consejo, he venido en exceptuar de Sortéos para reemplazo del Exercito á los hijos de Bataneros, y Prensadores de Ropas, que desde sus tiernos años se destinan á estas penosas fatigas, con calidad de que se dediquen á ellas con aplicación, y sin intermision, ó fraude, á aprender y exercitarse en esos oficios de sus Padres, y Maestros:...”(5)

BATÁN DE MEMBIBRE DE LA HOZ.
Madoz refleja en su diccionario, cuando se refiere a la industria de Membibre de la Hoz: “la agrícola, 3 molinos harineros y un batán”.
Dª Gavina Pecharromán Pesquera, hija del último batanero de Membibre nos cuenta que su abuelo, D. Francisco Pecharromán, que era natural de Fuentesauco, compró el batán entre el fin del siglo XIX y principios de XX cuando se caso con su abuela que era de Membibre. Su padre D.Teodosio Pecharromán, continuador del oficio compartió la profesión de batanero con la de agricultor. En tiempos del abuelo salía su padre, siendo niño, con una ristra de burros recorriendo los tejedores de los pueblos cercanos para traer las jergas a batanar. Era tal la carga que si alguna por estar mal atada se le caía, esperaba llorando en el camino a que algún labrador la pudiera volver a subir a la caballeriza.

El batán funcionaba todo el año movido por las aguas del río de la Hoz, situado muy próximo a su nacimiento, junto a la fuente de las Mengaduras y algo más retirado de la Fuentecillas.
Si bien sobre los años sesenta el trabajo para el batán había decaído mucho, la causa principal de su inactividad se debió al agotamiento de las fuentes que ya no daban suficiente caudal para trabajar con el ingenio.
Recuerda Gabina como había que estar atento mientras el batan funcionaba, porque los mazos se trababan con frecuencia, montándose uno sobre otro, cuando esto sucedía había que parar el batan y destrabarlos.
Las mantas una vez batanadas se ponían a secar estiradas sobre unos muretes de una altura de 80 centímetros que se habían construido expresamente para esta función.

Del batán de Membibre solo quedan en la actualidad los muros perimetrales, todo el sistema de la obra hidráulica (caz, balsa, saetín, socaz) y el árbol de la maquinaria. Partiendo de estos restos, de las indicaciones de la propietaria y del trabajo sobre el batan de Codesal en Zamora (6), hemos realizado una construcción gráfica didáctica que ayude a una mejor comprensión.

Jorge Miguel Soler Valencia



NOTAS:

1- Real Academia Española, DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA – 1992.
2- COLMENARES, Diego de, HISTORIA DE SEGOVIA – 1635.
3- CORTÉS Y VÁZQUEZ, Luis, EL PISÓN DE LA SALINA EN TREFACIO (SANABRIA), Revista de Dialectología y Tradiciones Populares - 1956.
4- LECEA Y GARCÍA, Carlos de, RECUERDOS DE LA ANTIGUA INDUSTRIA SEGOVIANA, F. Santiuste. Impresor de la Sociedad Económica de Amigos del País -1897.
5- LATORRE ANDRÉS, Pedro (Coordinador) El BATAN DE LACORT. Trabajo premiado en la Campaña de Arqueología Científica e Industrial de 1985 - Colegio Pilar-Maristas, Zaragoza –1985.
6- COCA DEL POZO, Nieves, ESPINAR DE ANDRÉS, Pedro E. y equipo, EL MOLINO-BATÁN DE ARRIBA EN CODESAL (ZAMORA), I.E.S. EZEQUIEL GONZALEZ de SEGOVIA-1988. (Queremos señalar la importancia de este trabajo que cuenta con un completo conjunto de planos)

Informante: Dª. Gavina Pecharromán Pesquera